22 de junio de 2010

Las otras regiones del IEC

El Índice de Economía del Conocimiento (IEC) es una herramienta útil para conocer que tan preparadas están las entidades federativas frente a una economía que hace uso intensivo de la información y del conocimiento individual y colectivo. En la publicación de 2008, México ante el reto de la economía del conocimiento, de la Fundación Este País, se presentan los resultados del IEC por entidad federativa, un valor de 1 representa el valor más alto por alcanzar y una valor de 0 es el menos deseable. La construcción del IEC aglomera veinte indicadores distribuidos en cinco dimensiones: 1) desempeño económico, 2) marco institucional y orientación al exterior, 3) sistema de innovación dinámico, 4) educación y recursos humanos calificados y 5) infraestructura de tecnologías de la información y comunicaciones.

En dicha publicación se agrupan los valores del IEC de las entidades federativas por regiones, siguiendo una regionalización bastante conocida y que suele utilizarse en enfoques territoriales, como el Territorial Reviews de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE).

La regionalización del IEC bajo este criterio, muestra dentro de otras cosas, las diferencias entre el desarrollo del norte y sur del país. Sin embargo, el criterio de esta regionalización, en mayor medida, esta basado en el vínculo geográfico de una entidad con sus vecinos que sobrepasa los límites político administrativos. Otra de forma de agrupar a las entidades federativas con base en el valor del IEC es por medio de una técnica de homogenización inherente, que en esencia, agrupa a las entidades por medio de conjuntos inherentes a los datos creando categorías a través de la identificación de los saltos de valor críticos en la secuencia de valores, en este caso, del IEC. Como se muestra en el mapa, se crean cinco categorías con valores del IEC: 1) de 4.608 a 5.743: donde solo se ubica al Distrito Federal, entidad con el mayor valor alcanzado; 2) de 3.859 a 4.608: agrupando a diez estados; 3) de 3.394 a 3.859: ubicando a seis estados; 4) de 2.853 a 3.394: con diez estados y 5) de 2.292 a 2.853: conteniendo a cinco estados.

Lo que salta a la vista de la agrupación por homogeneidad inherente es que toma como criterio los saltos de valor del IEC. Por esta razón solo existe una categoría para el DF, ninguna otra entidad alcanza 5 puntos en el IEC y hay homogeneidad en las otras categorías: dos con diez estados, una de seis, y otra de cinco. Podemos decir que esta regionalización responde a la homogeneidad de valores alcanzados en el IEC, es decir, los estados están agrupados de acuerdo a la similitud del grado de atributos característicos de la economía del conocimiento que poseen, lo que da pie a potenciales análisis regionales del IEC. Otra posible agrupación, que será motivo de otro post, es tomar en cuenta el valor de las cinco dimensiones que conforman el IEC.

Estas regiones del IEC pueden ser monitoreadas en el tiempo, con los datos de la ediciones 2005 y 2007, y, la actualización del IEC con base a la última información disponible.

Erick RS

9 de junio de 2010

Aniversario

El 5 de junio pasado se cumplió un año de la tragedia de la guardería ABC de Hermosillo, Sonora. Para recordar a los niños y familias afectadas, pero sobretodo para exigir justicia, se organizaron diferentes acciones tanto en Sonora como en otras entidades del país. Una intensa movilización ciudadana tuvo lugar en redes sociales como Facebook y Twitter. El clamor por la justicia duró prácticamente todo el fin de semana, y es previsible que el debate público siga todavía vivo por muchos meses.
Una tragedia de esta magnitud requiere un esfuerzo ejemplar por explicar lo ocurrido y por identificar y sancionar a los responsables… requiere entender que la memoria colectiva de una nación va mucho más allá de lo jurídicamente aceptable, y que ingresa sin restricciones en el terreno de lo simbólico.
La justicia en el caso Hermosillo tendrá que ir mucho más allá de las compensaciones económicas a los deudos. Lo que irrita a la nación no se limita a la responsabilidad directa e inmediata de personas e instituciones. Lo que nos lastima es el retrato de una nación con autoridades que no observan porque no quieren ver, y con una ciudadanía que indiferente deja de lado los problemas de otros.
Esa parte de la nación que nos irrita y lastima seguirá viva mientras los gobiernos sean la única fuente de transformación social. Es momento de fomentar la creatividad social en todo el país, y de visibilizar los esfuerzos de ciudadanos y organizaciones que exigen, que proponen, que buscan la calidad de las escuelas, que conservan parques nacionales, o verifican que las gasolineras nos entreguen litros de a litro. Ciudadanos todos ellos que nos recuerdan todos los días que México ya no quiere ser sólo un lugar de tragedias como la que hace un año, vivió la ciudad de Hermosillo.
Eduardo B.